Emma Watson en ropa interior tomando sol

Si te toca estudiar en Agosto y no puedes escaparte a la playa porque A) no vives cerca de una o B) no te concentras con el ruido y con tanto cuerpazo cerca, lo mejor es subirte a la terraza de tu casa a ponerte un poco moreno mientras le das bien a las mates. Eso es lo que habrá pensado Emma Watson. Lo que no se le podía haber ocurrido es que hay paparazzi hasta en las azoteas.

Concentrada leyendo, se hartó tanto del sol que no dudó en quitarse los pantalones y tostarse un poco mientras estudiaba algo. Claro que como no había previsto que iba a acabar quitándoselo todo, no se puso el bikini debajo, por lo que terminó tomando el solete en ropa interior.

Sí señores. Muy monas por cierto. Al menos las tenía de lencería fina. Peor hubiera sido si la hubieran pillado con la ropa interior de su abuela, las típicas blancas pordioseras que lamentablemente tenemos todas en nuestros armarios. Ella fue previsora y escogió un modelito muy mono esa mañana.

Eso sí, no daba más. Miradle la cara de sufrimiento. Con una mano sujetándose la cabeza y con la otra pasando las páginas. Hacía esfuerzos para no dormirse. Y su pelo enmarañado y su color rojo en plena sudada. Me atrevería a decir hasta que se hecho una cabezadita sin que nos diéramos cuenta. La pobre ahí toda concentrada y nosotros mirándole las braguitas y su careto de cansancio.

No cabe duda de que se podía permitir el lujo de quitarse toda la ropa que quisiera, o incluso más, porque Emma tiene un cuerpazo. Quizás hasta después de ver estas fotos la fichen en Victoria’s Secret.