Este mes, el Vogue español cuenta en su portada con Lindsay Lohan. Sin embargo, lejos de ser un posado más de la chica de esos que ya estamos hasta cansados de ver, este es de lo más curioso y realmente me ha gustado mucho.
Esta vez LiLo se convierte en Marilyn Monroe a la que rinde homenaje. Así con una peluca rubia y un estilismo muy propio de la mítica actriz, aunque mucho más salvaje, vemos que han conseguido unos grandes resultados. Eso sí, no penséis que se vino hasta aquí ha hacer las fotos, fueron tomadas en Los Angeles, en el Monte Griffith donde descansa el cartel de Hollywood que tanto identifica a la ciudad.
Sin embargo, yo que soy muy observadora y no se me pasa una, os diré que a pesar de que está muy logrado, no es la primera vez que vemos a Lindsay haciendo el papel de Marilyn, curiosamente, ya parece que es toda una asídua a imitar su imagen. El año pasado fue el New York Magazine el que le hizo un reportaje más picante con esa misma imagen, vamos que hasta se desnudó.Hay que recocer que Lohan sí que guarda cierto parecido con Monroe, pero quizá es ya un estilo recurrente, me parece a mi. Si es que la pobre aún no encontró el suyo propio, y no será porque no marea la perdiz.
En Vogue es menos intimista, pero son unas fotos con mucha fuerza. Fotogénica lo es bastante, eso no lo voy a negar. El próximo photoshoot podía ser de ‘Con Faldas y a lo Loco’ para no perder la costumbre…
